El Zero Waste es un movimiento, o mejor dicho una forma de vivir, sencillamente se basa en evitar al máximo posible la generación de residuos. Con unas prácticas y consejos muy sencillas que podemos aplicar a nuestro estilo de vida, tanto personalmente como para toda la familia, podremos reducir considerablemente la basura de nuestro entorno. ¿Quieres convertirte en un verdadero Zero Waster? Sigue leyendo.
¿Dónde se crea este movimiento?
En cuanto a su origen, nace mediados de los años noventa y principios de los 2000. ¿El lugar? Se cree que fue en Estados Unidos, cuando diferentes asociaciones y municipios comenzaron a adoptar medidas e impulsar proyectos que nos llevaran al objetivo de cero residuos. Tenían un objetivo y una preocupación clara: hacer de este mundo un lugar mejor. Y es por eso que se iniciaron en un proyecto tratando de reducir al máximo los residuos, hasta el punto de llegar a generar… ¡cero residuos! Suena difícil, pero varios años después varias organizaciones han demostrado que esto es posible.
¡Tenemos un objetivo claro!
Os vamos a dar algunos datos que seguro que te impactarán: el ser humano genera una media de 1,2 kilos de basura al día, lo que se traduce entre 7.000 y 10.000 millones de toneladas de residuos urbanos en todo el planeta entre todos los seres humanos. Increíble, ¿verdad?
¿Qué significa esto? Básicamente que tenemos un gran problema; y es que entre estos residuos se encuentran los objetos de un solo uso: la ropa (fast-fashion), la electrónica como móviles y ordenadores, muebles de pocos usos… en resumen, lo que conocemos como el consumismo extremo.
Por desgracia, nos hemos convertido en la generación de usar y tirar, es decir, nuestra cultura se basa en adquirir bienes, usarlos y tirarlos continuamente, sin ningún tipo de control. Y es que hay una cosa que debemos tener bien clara: cualquier material que se use como desechable es un derroche innecesario de recursos, por lo que es una práctica que debemos intentar evitar.
Por ejemplo, el plástico de un solo uso representa un problema como cualquier tipo de desechable, pero es que… va más allá. ¿Por qué? Muy sencillo, todo lo malo que genera el plástico es peor que cualquier desechable debido a varios factores como su toxicidad, su difícil y escaso reciclaje, su largo tiempo de degradación y la contaminación que genera en mar y tierra una vez acaba su vida útil. Algunos ejemplos de este tipo de plásticos son: envases de alimentos, vasos y tapas, pajitas, botellas desechables, bolsas, globos y palillos, bastoncillos de las orejas, maquinillas afeitar desechables y un largo etcétera. Así que si eres consumidor de este tipo de productos… para, piensa y busca una alternativa. ¡El planeta te lo va a agradecer!
¿Cuáles son las claves del Zero Waste?
Llevar a cabo este movimiento y, por consiguiente, convertirte en un Zero Waster es muy sencillo. Simplemente debes seguir la regla de las 5 erres. Te contamos cuáles son:
- RECHAZAR. Es necesario rechazar el uso de materiales desechables o que causen un gran impacto en el medio ambiente.
- REDUCIR. La clave es reducir al máximo todos los materiales que generan un impacto en nuestro planeta. Entendemos que conseguir un cero impacto es prácticamente imposible, por lo que intenta reducir su uso.
- REUTILIZAR. La era del reciclaje ha llegado: una camiseta se convierte en una falda, una lata en un bote o una botella en un jarrón. ¡No hay límites a la hora de reutilizar materiales!
- RECICLAR. Utiliza el reciclaje de una manera divertida y entretenida. De esta forma, será mucho más fácil y además te divertirás cuidando el planeta.
- ROT (compostar)
Colin Beavan es todo un experto en la regla de las cinco erres, tanto que Netflix creó un documental sobre su propósito durante un año: generar cero impacto en el medioambiente viviendo en Nueva York. Si quieres conocer un poquito más sobre su historia, te dejamos una sinopsis de la película. ¡No te defraudará!
Quiero empezar en el Zero Waste, ¿cómo lo hago?
Lo primero de todo que tienes que saber es que es un proceso sencillo, como ya hemos comentado. Sin embargo, no es dicho y hecho, sino que lleva su tiempo y hay que acostumbrarse poco a poco. No te agobies pero tampoco pretendas que la primera semana seas la personas más zero waste del mundo. Una buena forma de empezar puede ser concienciando a la gente de tu alrededor sobre la gravedad de este problema y darles a conocer el movimiento Zero Waste. De esta forma, será más sencillo iniciarse juntos en este conjunto de cambios que hemos dividido en tres:
–Cambio personal: debemos ser consciente del gasto material y energético que genera cada una de nuestras acciones, repensando nuestra manera de consumir.
–Cambio social: no solo debemos empezar a actuar en casa, también tenemos que llevarlo a nuestro lugar de trabajo y a las escuelas. Sencillo: darlo a conocer y generar conciencia social.
–Cambio estructural: para que esta iniciativa tenga éxito, es imprescindible que se apoye a nivel administrativo y se den facilidades para que, tanto ciudadanos como grandes empresas y organismos públicos, adopten estas medidas.
10 consejos que te proponemos:
- Utiliza siempre tu propio vaso o botella.
- Deja de usar las cápsulas de café, recupera la cafetera italiana del fondo del armario.
- Cambia tus bayetas sintéticas por unas de algodón y/o celulosa.
- Guarda la comida en tarros transparentes.
- Recuerda no pedir pajita cuando pidas una bebida.
- Cámbiate al jabón y champú en pastilla o a granel.
- Si organizas una fiesta en casa, utiliza vajilla reutilizable o biodegradable.
- Compra de segunda mando, siempre que sea posible.
- Cambia las pinzas de la ropa de plástico por unas de madera.
- Trae tu comida hecha en casa en un tupper.
¡Y recuerda! En Salad Planet estamos concienciados con el medioambiente y con este movimiento, por lo que… ¡no dudes más y ven corriendo a por una ensalada o wrap! Nuestros envases son cien por cien reciclados y nuestros platos están deliciosos.